Seguidores

jueves, 7 de noviembre de 2013


Esa lágrima de cristal que caia como el diamante, que brillaba en la oscuridad te iluminaba el camino hacia las estrellas, para verte a ti desde arriba de mi ventana y pensar que estaré en tu corazón.
Mirame cada mañana,
Piensame, nunca olvides el regalo que te di, nunca dejará de brillar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario